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| Tropas yanquis en Rojava... ¡Siempre es bueno tener a los enemigos principales de los pueblos bien lejos! |
El embajador de Estados Unidos en Turquía, poniéndose en
línea con las resoluciones de la “cumbre” realizada por los ministros de
relaciones exteriores turcos, rusos e iraníes unos días atrás, acaba de
declarar que su país “no apoya la unificación de los tres cantones de Rojava en
el norte de Siria”. Según el sitio Kurdish Question: “En una entrevista para un
programa de la NTV turca, John Bass dijo que su país apoya a las Fuerzas
Democráticas Sirias o SDF, pero solamente para alcanzar dos objetivos. El
primero es derrotar al Estado Islámico y el segundo, no crear ningún problema
con nuestro aliado en la NATO, Turquía”. / "No defendemos las pretensiones de ningún grupo que, por
el sólo hecho de haber derrotado a Daesh, pretenda modificar la geografía
política de la zona o las estructuras gobernantes” Por esa razón, Bass remató la
entrevista diciendo que Estados Unidos, de manera coherente con este
posicionamiento, “nunca entregó armas pesadas a YPG”. Los yanquis utilizaron a las fuerzas kurdas para derrotar a
sus enemigos en una guerra que ha involucrado a distintas facciones del
imperialismo y las burguesías regionales. Ahora, Estados Unidos está dejando
que su “perro de presa” turco, junto a sus aliados ocasionales - Rusia, Irán y
Siria - aplaste al “Confederalismo Democrático”, una experiencia autónoma que
cuestiona en los hechos a todos los pactos imperialistas preexistentes, como
Sykes Picot, Sevres y Laussane. Por suerte el pueblo kurdo ha ganado, además de territorios,
un gran prestigio y autoridad mundial, una posición que debe ser aprovechada
para organizar la solidaridad de los trabajadores y los pueblos de todo el
planeta, única manera de defender Rojava
y la perspectiva de la unificación de sus cantones.
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