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| Angela Merkel regañando a Erdogan, solo para las tribunas, porque después ella y los miembros de la UE trabajan para el dictador turco. |
Por Juan Giglio
¡Vergüenza! gritó el eurodiputado flamenco Sander Loones, de la Nueva Alianza Flamenca, una organización independentista de derecha,
que denunció la partida presupuestaria votada por socialistas, liberales y
conservadores, luego de que estos mismos personajes vinieran de resolver -el
24N- el congelamiento de los fondos europeos de adhesión de Turquía debido a las políticas represivas y antidemocráticas de Erdogan. La sorpresa fue muy grande, porque apenas una
semana después, en la votación del presupuesto, el Parlamento Europeo decidió no
sancionar Erdogan, además de pagarle, 595 millones de Euros. Loones decía al
respecto: "Hace apenas una semana, el Parlamento Europeo expresó un
lenguaje duro contra Erdogan… una semana después y el Parlamento Europeo
muestra con su acción que ya lo han olvidado … Me parece triste que los
partidos tradicionales europeos se quedan con las palabras. Ahora hemos tenido
la oportunidad de golpear Erdogan de forma efectiva en su cartera, y hay que
aprovechar las oportunidades. Una vez más hay declaraciones duras, pero fallan
los partidos tradicionales cuando los actos deben acompañar también las
palabras. Mientras Erdogan se ríe de nosotros”. Esto no es más que una
demostración de la inconsecuencia de los partidos capitalistas europeos en su “lucha
por la defensa de las libertades democráticas” que pisotea Erdogan, pelea que
solo puede ser tomada consecuentemente por los trabajadores y los pueblos de
Europa y todo el mundo.
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